De higos a brevas
Aunque higos y brevas son frutos de la higuera, entre unos y otros hay entre ocho y diez meses de diferencia. Los higos comienzan ahora, en agosto, y finalizan en septiembre. Mientras que las brevas aparecen en junio. Éstas son en realidad un higo holgazán, higos tardíos del año anterior que han permanecido en el árbol hasta la primavera siguiente.
Los higos tienen la piel verde y gruesa, y su carne es muy dulce. Mientras que las brevas tienen la piel morada y más fina, además, son algo más grandes pero menos dulces.
En España, los principales productores están en Huesca, Lérida, Ávila, Cáceres, Murcia o Alicante.
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Propiedades
Son una fruta con un valor nutricional muy interesante cuyo consumo es beneficioso para nuestra salud.
- Su aporte calórico, si se consumen frescos, es solo un poco mayor que el de las manzanas.
- Además de energía y mucha fibra, los higos aportan minerales como el calcio y el magnesio. El higo es la fruta que más calcio contiene: 35 mg/100 g en el caso de los frescos y 162 mg en los secos.
- En cuanto a vitaminas, destacan la vitamina K y, en los higos frescos, varias del grupo B, como B1, B5 y B6.
En los higos secos los valores nutritivos se concentran, multiplicándose aproximadamente por tres, debido a la pérdida de agua. Es una buena opción para deportistas y un fantástico endulzante natural.
Beneficios para la salud
- Pueden ayudar a controlar el peso gracias a su efecto saciante. Comer dos o tres higos como aperitivo antes de la comida reduce el apetito.
- Son fáciles de digerir.
- Además cuidan la microbiota intestinal, su fibra soluble actúa como prebiótico, estimulando el crecimiento de las bacterias beneficiosas en el intestino delgado.
- Son antioxidantes, el betacaroteno que contienen es transformado por el organismo en vitamina A, con acción antioxidante, que ayuda a prevenir el envejecimiento y las enfermedades degenerativas.
Cómo tomarlos
- Un aperitivo muy original pueden ser unas tostadas con queso mozzarella, higos y albahaca.
- Otro entrante muy fácil de preparar son lonchas de jamón con carpaccio de higos. Consiste en cortar muy fino el higo y acompañarlo con las lonchas de jamón y unos trocitos de queso fresco aliñados con aceite de oliva.
- También puedes preparar unos canapés de higos, anchoas y queso. Esta original mezcla es una auténtica explosión de sabor.
- Combinan muy bien con setas. Por ejemplo, en una ensalada con setas, brotes tiernos de lechuga variada y queso de cabra estarán deliciosos.
- Pueden ser el ingrediente estrella de las ensaladas, aportando un toque dulce irresistible. Combinan muy bien con hojas verdes como espinacas, rúcula, escarolas, berros o con endibias.
- También se pueden utilizar para preparar salsas para acompañar platos de carne. Para ello se pelan y cortan por la mitad y se dejan macerar en un bol con vinagre de jerez, brandy y un vaso de agua. Después, se sofríe una cebolla y ajo picados, y después se agregan los higos y el líquido restante. Dándoles vueltas hasta que se deshagan y, finalmente, triturándola con la batidora para obtener una salsa fina.
- No pueden faltar tampoco recetas dulces, como mermeladas, o preparaciones tradicionales como las tortas, el pan y los bocaditos.
- Aportan un toque dulce y delicioso a los smoothies: por ejemplo, combinándolos con manzana, leche, yogur y miel. O con leche de almendras y fresas. Con leche de avena y plátanos…
- Energy balls de avena e higos secos, para picar entre horas algo dulce y saludable. Tritura copos de avena, dátiles sin hueso, higos secos y un puñado de almendras crudas. Luego, forma bolitas con las manos y guárdalas en la nevera para que endurezcan y listo.
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Nos vemos en la próxima aventura y recordad… ¡No olvidéis jugar con la comida!
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