Sopa de pollo tradicional
Esta receta es indispensable en los días de frío… o en los días que te encuentras malito, sin fuerza… ¡y porque no! para cualquier día. Es la tradicional sopa de pollo que te hacía tu mamá o abuela y que casi te hace revivir, baja tu fiebre y hace que tus días de gripe o catarro sean más cortos.
Ingredientes:
- 1 Cebolleta
- 1 Zanahoria
- 1 Trozo de jengibre fresco o 1/2 cucharadita en polvo
- 1 Muslo de pollo
- 2 Huevos
- Fideos de grano fino
- 2 Litros de agua
- 1 Cucharadita de sal
- 1/2 Cucharadita de cúrcuma
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Preparación:
Comenzamos con la cebolleta, le quitamos el tallo y la capa exterior, también cortamos el nudo de la base y la partimos por la mitad; con esto ya está lista para añadir al caldo. Continuamos con la zanahoria, cortamos sus extremos y la pelamos. Después, preparamos el jengibre, un buen trozo, y lo pelamos. En cuanto al pollo es importante no quitarle la piel ni la grasa, porque tiene que darle consistencia y sabor al caldo.
En una cazuela vertemos 2 litros de agua y ponemos todos los ingredientes que hemos preparado, el pollo, la cebolleta, la zanahoria, el jengibre y una pizca de sal. También le puedes añadir una pizca de cúrcuma, le dará un tono dorado al caldo y muchas propiedades. Removemos un poco para disolver la sal y que la cúrcuma se reparta bien. Lo cocinameros a fuego medio-alto hasta que comience a hervir para luego dejarlo a fuego medio unos 40 minutos.
Mientras se hace el caldo cocemos dos huevos (7 minutos), uno por persona.
La cúrcuma y el jengibre tienen un montón de propiedades beneficiosas para el estómago y la digestión, así como un gran efecto antiinflamatorio. Todo esto con las verduras y el pollo es lo que nos da esa energía tan buena que nos ayuda a restablecernos y sienta tan bien.
Pasados los 40 minutos, el pollo y las verduras están tiernos y el caldo está listo para colarlo. El pollo y la zanahoria los reservamos, el resto lo desechamos.
La zanahoria la puedes preparar en rodajas o aplastada con un tenedor, hecho esto la reservamos. Pelamos la piel del pollo y le vamos quitando la carne, rompiéndola, y la reservamos también.
Ponemos el caldo de nuevo al fuego, si estamos preparando sopa para dos, por ejemplo, con cuatro cucharones será suficiente. Añadimos el pollo y la zanahoria al gusto, yo he puesto casi todo. Cuando empiece a hervir agregamos los fideos, removemos un poco, y lo cocinamos el tiempo que indique el paquete.
Cuando los fideos estén hechos, apartamos la olla del fuego y servimos. Para terminar, picamos un huevo cocido en el centro de cada plato y ya está lista nuestra sopa para disfrutar bien calentita.
Nos vemos en la próxima aventura y recordad… ¡No olvidéis jugar con la comida!
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