Reboot de patatas bravas
Hoy cogemos una receta clásica, de las de toda la vida y la transformamos para hacerla más moderna y espectacular. ¡Cocina conmigo ésta nueva versión de patatas bravas y sorprende a tus amigos!
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Ingredientes:
- 200 ml de aceite de oliva
- 1/2 Cebolla
- 2 Dientes de ajo
- 1 Huevo
- 1/2 Cda de pimentón dulce
- 2 Cdas de salsa de soja
- 2 Cdas de chipotles molidos (opcional)
- 150 ml de aceite de girasol
- 1 Cda de zumo de limón
- 1 Cda de azúcar
- 6 Patatas medianas
- 1 Kg de tomates
Preparación:
Para hacer unas buenas patatas bravas es primordial contar con las mejores salsas, así que empezaremos por ahí.
Preparar la salsa brava
Comenzamos preparando la salsa brava, que será moderadamente picante. No es la tradicional, pero os aseguro que os encantará.
Primero hay que escaldar los tomates. Para ello hay que sumergirlos durante 2 minutos en agua hirviendo. De esta forma, la piel se separa del tomate fácilmente, pero el interior no llega a cocinarse. Vamos a pelarlos, cortarlos y reservarlos para el siguiente paso.
A continuación, en una sartén, con un chorrito de aceite de oliva, vamos a ir pochando la cebolla a fuego medio. No olvides añadir una cucharadita de sal y pimienta al gusto.
Una vez dorada la cebolla, agregamos el pimentón dulce y el tomate que habíamos reservado ya troceado. Después, vertemos por encima la salsa de soja y los chipotles molidos (o la salsa picante que más te guste). También, añadimos una cucharada de azúcar, que equilibrará la acidez del tomate y servirá para darle cuerpo a la salsa. Deja que se cocine hasta que el tomate esté tierno y la salsa haya espesado.
En ese momento la puedes retirar del fuego, pasar a un vaso y batir. A continuación, la volvemos a la sartén y la dejamos a fuego bajo, para que reduzca poco a poco, corregimos de sal y cubrimos con una tapa. Cuando haya espesado estará lista.
Preparar la mayonesa de ajo
La segunda de las salsas que necesitamos es una mayonesa de ajo. Yo suelo utilizar más aceite de girasol que de oliva, porque me gusta que tenga un sabor más suave.
Vertemos 180ml de aceite de girasol en un vaso batidor, 100ml de aceite de oliva, 1 o 2 dientes de ajo (según lo picante que te guste), 1cucharada de zumo de limón, una pizca de sal y un huevo. A continuación, sólo tienes que batir, pero ojo, sin mover la batidora. Al principio la dejas en el fondo y, cuando emulsione, ya puedes subirla y bajarla un poco para que termine de mezclarse todo. El resultado es una mayonesa de sabor suave con un delicioso sabor a ajo.
Preparar las patatas bravas
Una vez listas las salsas ya podemos comenzar con las patatas.
Primero, hay que cocer las patatas (con la piel) a fuego medio, con un poco de sal y unas hojas de laurel. Cuando estén tiernas retíralas del agua y deja que se enfríen para pelarlas.
Aplasta las patatas con un tenedor, añade un poco de sal, de pimienta y un chorro de aceite de oliva. Mezcla bien con el tenedor hasta tener una masa blandita. Al final podrás amasarla con las manos y, cuando puedas hundir el dedo sin que se quede pegado, es que ya está lista.
Una vez lista la masa ya podemos pasarla por la gofrera. Coloca dos bolitas de masa en el centro y deja que se hagan a máxima temperatura. Te quedarán redonditas y crujientes por fuera y con un interior de puré sabroso.
Para la presentación, apila dos gofres de patata y rellena los agujeros alternando cada una de las salsas. Para rematar y conseguir un contraste de color y sabor, puedes añadir un poco de cebolleta picada justo en el centro.
Ya está lista nuestra nueva versión de patatas bravas, crujiente, sabrosa, ligeramente picante y con una presentación que sorprenderá a tus invitados.
Si te ha gustado ésta receta y quieres seguir jugando en la cocina con las patatas aquí tienes otra que seguro te va a gustar. Y, si quieres saber más sobre las patatas bravas originales y los mejores sitios para disfrutarlas, sigue éste enlace.
Nos vemos en la próxima aventura y recordad… ¡No olvidéis jugar con la comida!
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