Pan de leche casero

Esta vez voy a enseñaros a crear desde cero un pan sorprendente, esponjoso y semidulce. Es perfecto para desayunos aunque también contrasta con recetas saladas a las que le quede bien un toque dulce. ¡Demos la bienvenida al pan de leche! Un clásico de los 80-90 que los niños de España disfrutaban en una merienda con chocolate llamada Bollicao. Sí, es prácticamente el mismo pan de entonces. Con crema de cacao o mermelada está riquísimo, y mucho mejor si lo mojas en leche fría.

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Ingredientes:

• 280g de harina de fuerza
• 35g de azúcar
• 4g de sal
• 4g de levadura de panadero
• 1 huevo
• 140ml de leche
• 40g de mantequilla sin sal

Preparación:

Elaborar la masa

Comenzamos mezclando en un bol la harina de fuerza con el azúcar, la sal y la levadura.
Una vez que la mezcla esté uniforme, añadimos el huevo y la leche, que deberá estar templada, entre 25 y 40 grados, nunca más caliente porque mataría la levadura.

Ahora, hay que amasar (lo puedes hacer a mano o a máquina) durante 8 minutos, hasta que la mezcla quede uniforme y suave.
A continuación, añadimos la mantequilla y continuamos amasando hasta que se absorba toda la grasa. Después de 10 minutos verás que la consistencia ya es firme y no se pega en los dedos.

Sacamos la masa del bol y le damos forma de bola con las manos. Después, la volvemos al recipiente para que repose, tapada con film transparente, durante una hora a temperatura ambiente.
Transcurrido ese tiempo, la masa habrá doblado su tamaño y estará más blanda.

Dar forma al pan de leche

Sacamos la masa del recipiente y la amasamos para liberar el aire que ha acumulado. Después, la dividimos en tres trozos iguales.

Con cada pedazo de masa haremos una bola, remetiendo hacia el interior por la parte de abajo. De esta forma las paredes exteriores quedan tersas y la fermentación es más efectiva.

Engrasa un molde con mantequilla derretida para que el pan no se pegue y suba mejor.
Colocamos las tres bolas de masa en el molde, tapamos con film transparente y dejamos reposar de nuevo. Una hora después, verás cómo la masa ha crecido de forma espectacular.

Hornear

Ya está lista para hornear, la pondremos a 150ºC con calor por arriba y por abajo durante 17 minutos (con el horno precalentado previamente).
Al sacarlo del horno deja que repose 10 minutos antes de desmoldar. Después, lo puedes dejar encima de una rejilla para que repose hasta que baje temperatura ambiente.

Ya está listo para disfrutar nuestro pan de leche, tierno, esponjoso y dulce.

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Nos vemos en la próxima aventura y recordad… ¡No olvidéis jugar con la comida!

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