Cordero asado con patatas
Aprende a preparar una buena pierna de cordero al horno, sin miedo a que te quede seca o le falte sabor. Será el plato perfecto para sorprender a tus invitados y lo vamos a acompañar con las mejores patatas asadas que hayas probado jamás.
El secreto está, sobre todo, en una buena carne. Hoy voy a utilizar una pierna de cordero de raza segureña; consumiendo alimentos procedentes de nuestras razas autóctonas colaboramos para evitar la extinción de muchas de ellas. Conoce las más cercanas a donde vives.
Ingredientes:
- 1 Pierna de cordero
- 5 Patatas medianas
- 2 Cabezas de ajo
- 400ml de vino blanco
- Pimienta molida
- Tomillo y romero fresco (opcional)
- Grasa o manteca de cerdo
[amazon box=”B01GIBE4WY”]
Preparación:
Comenzamos cortando las patatas en gajos, en cuatro trozos más o menos, deben estar bien lavadas y con la piel. Después, cortamos las dos cabezas de ajo por la mitad.


Ponemos un poco de aceite de oliva en la fuente y colocamos la pierna de cordero en el centro, con la piel hacia abajo, y la rodeamos con las patatas y las cabezas de ajo. Añadimos un vaso de agua y otro de vino blanco y salpimentamos todo al gusto. Pasamos la mano por la carne para repartir bien la sal y la pimienta. Opcionalmente, puedes añadir también una ramita de tomillo y otra de romero, si las colocas debajo de la carne no se quemarán y liberarán todo su sabor.


Sólo falta hornear, pondremos el horno a 150ºC con calor por arriba y abajo. Dejamos que se cocine 40 minutos, lo sacamos y damos la vuelta a la pierna de cordero y a las patatas. Un truco para que la piel quede más dorada y crujiente es pintar toda la superficie con manteca de cerdo, y no olvides salpimentar también este lado.
Antes de volver al horno, os voy a enseñar mi truco para las patatas. Vamos a meter los dientes de ajo (que ahora están súper tiernos) en un vaso, con un poco de agua, y los trituramos. Nos quedará una crema con la que pintaremos todas las patatas, esto les dará un sabor brutal.


Lo volvemos a meter al horno, ahora con la temperatura a 200ºC.
Primero, deberá estar 30 minutos con la piel hacia arriba. Luego, le damos la vuelta, y lo dejamos otros 30 minutos con la piel hacia abajo. Terminaremos con 30 minutos más con la piel hacia arriba.
El resultado no puede ser más delicioso. Una carne dorada, tierna y jugosa y las patatas con todo el sabor del cordero y del puré de ajo.

Nos vemos en la próxima aventura y recordad… ¡No olvidéis jugar con la comida!
[amazon box=”B01HIBC9SE,B07ZNPLZ6Q,B08F21J7MN” grid=”3″]